Como comenta el procurador Bruno Garcia Redondo, cuando un producto presenta defectos, es fundamental conocer los tipos de garantía disponibles para asegurar tus derechos como consumidor. Muchas personas no saben distinguir entre garantía legal, contractual y extendida, lo que puede llevar a la pérdida de beneficios importantes. Con esto en mente, en este artículo entenderás las diferencias entre cada una, cómo exigir tus derechos y cuáles son los plazos válidos. ¡Sigue leyendo para no perder ningún detalle!
¿Qué es la garantía legal y cómo funciona?
La garantía legal es un derecho previsto en el Código de Defensa del Consumidor (CDC) y no depende de ningún acuerdo adicional con el proveedor. Según Bruno Garcia Redondo, asegura que los productos y servicios deben durar un período razonable, conforme a su naturaleza y expectativa de uso. Así, si surge un defecto dentro de ese plazo, el consumidor puede exigir reparación, cambio o incluso la devolución del dinero.

En Brasil, la garantía legal mínima es de 90 días para bienes duraderos y 30 días para no duraderos, pero este período puede ser mayor dependiendo del caso. Al final, lo importante es recordar que este derecho no puede ser renunciado y es válido incluso si la tienda o el fabricante no mencionan esta obligación.
La diferencia entre garantía contractual y extendida
Mientras que la garantía legal es obligatoria, la contractual es una oferta adicional hecha por el fabricante o vendedor, generalmente con plazos más largos. Según explica el doctor Bruno Garcia Redondo, esta modalidad suele cubrir defectos de fabricación por un período específico, como 12 o 24 meses, pero sus condiciones deben estar claras en el contrato.
Por su parte, la garantía extendida es un servicio opcional, pagado por separado, que prolonga la cobertura más allá del plazo original. Muchas veces incluye asistencia técnica especializada y otros beneficios, pero es determinante leer el contrato con atención para evitar sorpresas.
¿Cómo puede el consumidor hacer valer sus derechos de garantía?
Si un producto presenta problemas dentro del plazo de garantía, el consumidor debe actuar rápidamente. Según Bruno Garcia Redondo, el primer paso es contactar al proveedor y formalizar la reclamación por escrito, guardando todas las pruebas, como facturas y registros de comunicación.
En caso de que la empresa se niegue a cumplir con su obligación, es posible acudir a los organismos de defensa del consumidor, como el Procon, o incluso presentar una demanda judicial. De hecho, el CDC establece plazos para respuestas y soluciones, y el consumidor no puede ser perjudicado por fallos ajenos.
¿Qué hacer si la garantía es negada injustamente?
Muchas empresas intentan evadir sus responsabilidades alegando mal uso o desgaste natural del producto. Sin embargo, como señala el procurador Bruno Garcia Redondo, el consumidor no tiene que aceptar estas justificaciones sin pruebas. Por lo tanto, si hay sospecha de mala fe, es posible recurrir a peritajes técnicos y buscar apoyo jurídico para garantizar la reparación adecuada.
¿Cuáles son los plazos de garantía en Brasil?
Para resumir, los plazos varían según el tipo de garantía y el producto en cuestión. Mira a continuación los principales puntos a considerar:
- Garantía legal: 90 días para productos duraderos y 30 para no duraderos.
- Garantía contractual: Definida por el fabricante, pudiendo ser de 1 a 3 años.
- Garantía extendida: Puede llegar a 5 años, dependiendo del contrato.
¡Conoce tus derechos y exige lo que te corresponde!
En conclusión, entender las diferencias entre garantía legal, contractual y extendida es esencial para proteger tus derechos como consumidor. La legislación brasileña ofrece mecanismos eficaces para asegurar que los productos y servicios cumplan sus funciones conforme a lo esperado. Así que, siempre que sea necesario, no dudes en reclamar tus derechos ante los proveedores u organismos competentes.
Autor: Raymondo Murphey